El mercado de Vila Nova de Cacela


Hay una cita en el Algarve a la que son asiduos visitantes quienes viven en el entorno de la frontera, se trata del mercado de Vila Nova de Cacela. Un laberinto de puestos, desde el pasado año en el centro de la localidad, que conforman un gran hipermercado callejero en el que es posible encontrar cualquier cosa, sobre todo una gratificante experiencia para una mañana de domingo.


El mercadillo más antiguo que recuerdo en el Algarve, el primero que pisé junto con la 'Feria de la Loza' de Vila Real de Santo António, es de Vila Nova de Cacela. Entonces los puestos se situaban en la carretera de acceso a la localidad y se extendían hasta el centro de la localidad, conformando una larga calle atiborrada de gente por la que se perdían mis hijos buscando entre los puestos camisetas de fútbol. Hoy tengo 'saudades' de aquellos días.


Después de situarse unos años en un gran descampado junto a la N-125 entre higueras y almendros, el mercado volvió el pasado año a acercarse a la localidad, ubicándose en el centro mismo de la misma, en el Jardín del Largo Manuel Cabanas, donde se celebran los bailes y sardinadas de los Santos Populares.


El tercer domingo de mes, todo el entorno del jardín y las calles colindantes al Mercado de Abastos se ven ocupadas por decenas de puestos de todo tipo: ropa, toallas, manteles, legumbres, plantas, ollas, quesos, frutas...


Me gusta venir aquí, no sólo por las gangas de estos mercados ambulantes o por el entretenimiento que supone recorrer los tenderetes, sino también porque entre ellos siguen estando muy presentes los artesanos y productores de la zona con artículos, con su miel, con sus quesos, con sus cestos, con utensilios difícil de encontrar en cualquier otro lugar.


El mercado no deja de ser también una cita muy golosa. La ruta por el mismo comienza con los churros algarvios, con las manos aceitosas de la ricas 'farturas' salpicadas de azúcar y canela. Durante el paseo tampoco puede falta alguna que otra parada para los 'queijinhos' o las frutas frescas. Y, el punto y final, llega con la mini Sagres o una Crystal bien fría con la bifana. ¡Un buen fin de fiesta!


DATOS DE INTERÉS

-Se celebra durante la mañana todos los tercer domingo de mes en la zona colindante al Jardín Manuel Cabanas y el Mercado de Abastos.

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